Cloro

El cloro o lejía es un producto infaltable en el hogar que hace maravillas en la limpieza de tus espacios por ser un poderoso desinfectante. Además, tiene usos insospechados que una vez que los descubras lo emplearás para infinidad de funciones.

Desde eliminar el terrible moho hasta conservar las flores de tus materos por más tiempo, puedes usar el cloro para mucha más cosa de las que te imaginas. Uno de mis favoritos es que lo puedes usar para todo lo que esté hecho de porcelana en tu casa.

Usos del Cloro Domestico o Comercial

Desinfecta los utensilios de madera

Si se te cayó al suelo la cuchara de madera con la que cocinas, o la encuentras guardada en un cajón donde lleva mucho tiempo, no tienes por qué preocuparte. Llena el fregadero de agua caliente y coloca una porción de cloro. Sumerge allí los utensilios de madera que desees desinfectar y al cabo de una hora, vacíalo completamente. Lávalo con detergente como de costumbre y si deseas que el potente olor a cloro se esfume, remoja en agua limpia el implemento durante otros 15 minutos ¡Podrás usarlo con toda confianza!

Elimina la mala hierba

Esos rastros de maleza que aparecen en tu jardín e incluso en materos, cuando los arrancas tienden a volver a salir. El truco consiste en bañarlo completamente con cloro concentrado y luego quitarlo de raíz. Verás como no volverá a nacer, ya que estás atacando directamente la tierra donde crece.

Desaparece los criaderos de insectos.

Como es bien sabido, los mosquitos se procrean en aguas estancadas. Para mantener la salubridad en tu casa y en las zonas aledañas, coloca cloro en donde veas agua empozada, y verás cómo hasta las larvas mueren. Esto es especialmente útil en áreas donde se propagan epidemias como el dengue y la chikungunya, entre otras.

Alarga la vida de tus flores

Colocar cloro al agua del recipiente donde tienes esas flores que armonizan y decoran tu hogar hará que se conserven por más tiempo. ¿La razón? El cloro mata las bacterias que se proliferan en el agua y les permite a las especies vegetales extender su duración. Eso sí, recuerda que la cantidad de cloro debe ser mínima: tres gotas por cada litro de agua será más que suficiente.

Combate los hongos

Esos rincones de la casa súper húmedos donde se forma el dañino moho, una especie de hongo que provoca alergias respiratorias en niños y adultos, los puedes limpiar directamente. Primero, restriega la superficie con un cepillo de cerdas gruesas y agua caliente. Esparce cloro diluido en agua y déjalo actuar durante 15 minutos. Enjuágalo con agua limpia y una esponja. Te recomiendo que uses guantes en este y cualquier otro procedimiento que emplee cloro o sustancias concentradas.

Purifica los cristales

Nada como tomar en un vaso que luzca pulcro. La mejor manera de lograrlo es sumergir tus vajillas de vidrio o cristal en agua caliente con cloro, y dejarlo actuar durante 15 minutos. Lávalos bien y notarás la purificación y limpieza.

Blanquea porcelana

Así como el cloro deja tus cristales relucientes, lo mismo hace con la porcelana. Y no hablo solamente de tu vajilla, también del inodoro y del lavamanos.